La poco frecuente gratificación a la banca (si es que está permitida) por parte de un jugador cuando obtiene un cierto beneficio en una apuesta, mantiene calmada la atmósfera y representa una garantía contra la posibilidad de ser estafado.
El procedimiento más usual de hacerlo consiste en colocar un par de fichas al borde del cuadrado de apuestas, como un añadido a la propia apuesta y decirle al banquero: «Esto es para usted». Si la mano del jugador gana, el banquero se embolsa tanto su gratificación como el dinero que ha ganado con ella. Si no ocurre así pierden ambos, usted y el banquero, y este último le agradecerá su generosidad diciendo: «Gracias por su apuesta»
sábado, diciembre 11, 2004
gestos y apuestas
Publicadas por Anónimo a la/s 2:07 p. m.
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